La otra economía » 2012 » August

Notas archivadas en ''

La pobreza llega a Europa y yo con estos pelos, bis

He ampliado un poco el apunte de hace unos días para su publicación en Rebelión añadiéndole algunos datos sobre la situación de la pobreza en Europa usando las estadísticas oficiales de Eurostat.

Podéis leerlo, si os apetece, pinchando aquí.

 

¿Por qué una Asamblea Constituyente?, entrevista a Roberto Viciano

Esta entrevista en ATTAC TV a mi compañero y sin embargo amigo Roberto Viciano, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Valencia, me parece de una clarividencia absoluta para entender qué es un proceso constituyente, para qué sirve, por qué es absolutamente necesario en estos momentos y cómo puede acometerse.

No habla de oídas, como tanta gente lo hace estos días sobre este tema, porque ha participado en varios de esos procesos en el marco de los procesos de cooperación que desde la Fundación CEPS hemos desarrollado al respecto, así que creo que la entrevista tiene un valor añadido muy importante.

Si la entrevista os resulta de interés podéis complementarla con la lectura del libro “Por una Asamblea Constituyente”, en el que él también participa y cuya aparición reseñé aquí hace unos meses.  Si no queréis o podéis comprarlo, podéis descargarlo pinchando aquí.

¿Por qué una Asamblea Constituyente? / Roberto Viciano from ATTAC.TV on Vimeo.

La pobreza llega a Europa y yo con estos pelos

El título de este apunte recoge cuál es la percepción que comienzan a tener de la situación las grandes empresas productoras y distribuidoras de alimentos y bienes de consumo; esas que nos surten, bajo sus diferentes marcas, de la mayor parte de los productos que componen nuestra cesta de la compra.

Son esas empresas, las que tratan de anticipar el futuro y adaptarse a lo que vendrá para seguir obteniendo beneficios, las que más claro tienen algo que vengo repitiendo desde hace tiempo en apuntes de este cuaderno, artículos y charlas  para desasosiego de la audiencia que suele mirarme como si fuera el quinto jinete del apocalipsis: que las clases medias van a ser las grandes damnificadas de esta crisis y de las políticas para “salir” de la misma que están implementando los gobiernos de la periferia europea y, en concreto y para lo que nos ocupa, los nuestros, éste y el anterior.

¿Y a cuento de qué viene esto? Pues a cuento de las declaraciones a un periódico alemán del responsable para Europa de la tercera mayor compañía mundial de productos de consumo, Unilever. Este señor, que debe saber de lo que habla porque su trabajo depende de seguir vendiendo más aunque la gente cada vez pueda comprar menos, no ha dudado en afirmar que “la pobreza vuelve a Europa” y que, por lo tanto, en su compañía se están replanteando su estrategia de negocio para Europa en un contexto de pobreza creciente.

Esa estrategia pasa, esencialmente, por lo que cualquiera que haya viajado por países pobres o de los denominados “emergentes” ha podido ver: la venta de productos básicos (de higiene personal, de limpieza, alimentos, etc.) en dosis individuales. Aunque no por ello el producto es más barato, más bien al contrario, sí que supone una parte menor del menguado presupuesto con el que el consumidor acude a realizar sus compras y le permite a la compañía mantener las ventas y sus beneficios facilitando el acceso al consumo a una parte de la población que quedaría excluida en caso de mantenerse los formatos tradicionales.

Así que si ese es el futuro que prevén empresas que dedican millones de euros a analizar estrategias de consumo y perspectivas de mercado no seré yo quien les lleve la contraria por mucho que sigan mirándome como si fuera el quinto o el sexto jinete del apocalipsis. 

¿Que por qué España no es Alemania?

En Alemania, en donde cerraron el primer trimestre con un superávit presupuestario del 0,6% del PIB, los evasores fiscales, en su mayor parte millonarios que aprovechan la proximidad de Suiza y Lichtenstein y su secreto bancario para evadir impuestos, andan de los nervios desde que las autoridades fiscales se han dedicado a comprar CDs de información bancaria confidencial robada y vendida por funcionarios de los mismos bancos en los que aquéllos hacen sus opacos negocios. El temor ante la sanción es tal que están acudiendo masivamente ante las autoridades para confesar y negociar una sanción más baja. Así, por ejemplo, “en las dos primeras semanas de agosto se autodenunciaron 117 evasores fiscales en el Estado de Baden-Würtemberg; otros 61 hicieron lo mismo en Berlín; y entre los días 5 de julio y 2 de agosto, 93 millonarios pidieron el perdón oficial en Renania del Norte Westfalia”. Todo ello se traduce en que, “según el ministro de Finanzas de Renania del Norte Westfalia, solo en su Estado se han recaudado, gracias el interesado mea culpa de los evasores fiscales, unos 2.000 millones de euros”.

En España, en donde se ha subido el IRPF y el IVA, se ha suprimido una paga extra a los funcionarios y se les ha rebajado el sueldo, se ha introducido el copago farmacéutico, se ha recortado en Sanidad y Educación, se ha sido cicatero hasta el extremo con la ayuda a los desempleados sin prestación y decenas de medidas más que atentan a la capacidad adquisitiva y las condiciones de vida de la mayor parte de la población, el gobierno declaró una amnistía fiscal para que todo aquel evasor que buenamente quisiera blanquear su dinero al módico precio del 10% de lo blanqueado y la promesa de que no se investigaría nada de lo que declarara. Paguen una pequeña comisión por lo defraudado y aquí paz y mañana gloria, venía a decir Montoro.

Con esa medida, que de tan injusta es obscena y que ha sido criticada hasta por la Comisión Europea, se pretendía recaudar la friolera de unos 2500 millones de euros, lo que a nuestro ministro le debe parecer una cantidad lo suficientemente relevante como para cargarse los principios más básicos de la justicia fiscal y la equidad. Debe ignorar que, según el último informe del instituto británico Tax Research denominado “Closing the European Tax Gap”, nuestra Hacienda deja de recaudar al año casi 73.000 millones de euros por culpa la falta de voluntad política en la lucha contra la economía sumergida y el fraude fiscal (el resumen ejecutivo en inglés puede leerse pinchando aquí).

Como los evasores fiscales no suelen ser tontos y si lo son contratan a asesores fiscales inteligentes para que les gestionen estas cuestiones, la resultante final ha sido que la amnistía fiscal se encontró con que en sus primeros quince días tan sólo se habían presentado 115 declaraciones y ninguna de alguna gran fortuna o empresa; desde entonces las cosas no creo que hayan mejorado mucho porque no había ningún incentivo para que, más allá de esas 115 almas caritativas y con mala conciencia, las grandes fortunas se lanzaran a declarar sus culpas y arreglar a precio de saldo sus deudas con el fisco. Unas grandes fortunas y empresas a las que destaco porque, como afirma Gestha, la Asociación de Técnicos del Ministerio de Hacienda, son ellas las responsables de casi el 72% del total de la evasión fiscal total del país.

Así que ahora, si queremos, podemos seguir divagando acerca de por qué los alemanes están hasta las narices de los gobiernos de los países de la periferia de la Eurozona o de por qué hay algún millonario alemán pensando en nacionalizarse español en tanto vuelven las futuras pesetas.

 

Los acreedores también lloran

Hoy publico en Funds People un artículo sobre la decisión de Bruselas de forzar al gobierno español a que los acreedores de los bancos que reciban ayudas públicas sean los primeros en soportar las pérdidas de la entidad. Por fin alguien se decide a imponer un poco de cordura y hasta de justicia. Y es que no es lógico y es profundamente injusto que quienes se han beneficiado durante los años de bonanza de los dividendos repartidos por esas instituciones ahora pretendan salir indemnes trasladando todo el peso del rescate a los contribuyentes.

Podéis leerlo pinchando aquí. 

C’est la vie

En Francia, en donde, según los últimos datos de Eurostat, la tasa de desempleo de los jóvenes menores de 25 años era a junio de 2012 del 22,8% de la población activa (exactamente el mismo porcentaje que hace un año, es decir, que no ha empeorado a pesar de que las condiciones económicas sí lo han hecho), el gobierno de Hollande ha propuesto subvencionar la contratación de 150 mil jóvenes desempleados sin cualificación para facilitar su inserción en el mercado laboral .

En España, en donde, según la misma fuente, la tasa de desempleo de los jóvenes menores de 25 años era a junio de 2012 del 52,7%, es decir, algo más de 6 puntos superior a la de junio de 2011 (cuando ya era del 45,9% de la población activa), el gobierno de Rajoy está barajando la posibilidad de retirarles la ayuda de 400 euros que cobraban, una vez agotada la prestación por desempleo, si se demuestran que viven en casa de sus padres.

(Excurso: por ciento, dónde carajo querrá este gobierno que viva una persona con 400 euros al mes si no es en casa de sus padres o compartiendo vivienda. Igual en el Consejo de Ministros piensan que con esa misérrima ayuda les da a todos para pagarse, a cuenta del Estado, una hipoteca como la del ático que se acaba de comprar de Guindos -por cierto, y dicho sea de paso y sin malicia alguna-, justo antes de que suba el IVA de la vivienda, no vaya a tener que pagar más impuestos, que ya se sabe que las cuentas están boyantes y los esfuerzos siempre es mejor que los hagan otros aunque los pida tu jefe. Fin del excurso).

Como puede apreciarse, las sensibilidades de ambos gobiernos para enfrentar los problemas de sus ciudadanos, especialmente los de aquellos más débiles y con más dificultades para insertarse en el mercado laboral y poder iniciar vidas autónomas e independientes, distan entre sí tanto como dista su democracia de la nuestra. Y es que eso de hacer una revolución y que rueden cabezas marca mucho.

En fin, c’est la vie!

El empleo, de Santiago “Bou” Grasso

Terminaremos la semana con algo aparentemente ligero pero que lleva en sí una importante carga de profundidad.

Se trata de un cortometraje del animador argentino Santiago “Bou” Grasso en el que se reflexiona sobre la explotación del hombre por el hombre y el papel del trabajo en nuestra sociedades.

Unas sociedades en que es cada día más evidente tanto la cosificación de la persona y su uso mercantilizado al servicio de la economía como la mercantilización de la relación laboral y su vaciado de cualquier tipo de consideración en tanto que relación social. Retornamos a los tiempos de la explotación desnuda, del ejército industrial de reserva y del homo homini lupus. Cada día más cerca de la barbarie, más alejados de la civilización.

 

Reseña del libro “Quiénes son los mercados y cómo nos gobiernan”

Para el último número de la Revista de Economía Crítica escribí una reseña del libro coordinado por Bibiana Medialdea titulado “Quiénes son los mercados y cómo nos gobiernan” y que, desde aquí, recomiendo su lectura. Y lo hago no porque la mayor parte de autores sean amigos, sino porque son un magnífico grupo de jóvenes economistas críticos tan rigurosos en sus análisis como comprometidos con nuestra sociedad y la defensa de un mundo más justo para todos. Y creo, además, que este libro es muy útil para todas aquellas personas interesadas en adentrarse, paulatinamente, en el conocimiento de los agentes y los procesos que controlan cada día de forma más intensa y evidente nuestras vidas.

El libro, publicado por la editorial Icaria, podéis descargarlo de forma gratuita pinchando aquí y si queréis leer mi reseña, que no porque sean amigos deja de ser crítica, podéis hacerlo pinchando aquí. 

Alberto Montero